Jalisco, México

Artesanos michoacanos construyeron un altar monumental sobre la tumba de Vicente Fernández, en el rancho Los Tres Potrillos, en el marco del primer aniversario luctuoso del destacado músico.

Para adornar el umbral en donde la familia Fernández y miles de mexicanos esperarán el regreso de El Rey, en la noche del 1 al 2 de noviembre, se utilizaron más de 72 mil flores de cempasúchil de origen michoacano.

Para dar luz al camino que seguirá Chente durante su regreso a su antiguo hogar, se emplearon, además, 20 veladoras de cera escamadas en el centro del altar y más de 2 mil que iluminarán el camino desde la entrada del Rancho Tres Potrillos hasta la tumba.

Fueron un total de 300 metros lineales de adornos con listones, canastos y flores de hoja de maíz. Destacan unas fotos monumentales que se coloraron por el camino en honor a Vicente Fernández.

Desde Michoacán también se llevó al Rancho el tradicional “tapete de muertos”, en el que se le dibujaron elementos como notas musicales, flores, mariposas monarcas, el logo del cantante VFG. En medio de todo sobresale la frase: “Y sigo siendo el Rey”.

Tequila y otros vinos, pan de muerto, fruta, gran variedad de sus chocolates favoritos, su traje de charro y su montura de caballo, son elementos que se encuentran expuestos en el altar monumental al Charro de Huentitán.

Esta iniciativa de la familia Fernández, involucró el trabajo de más de 50 michoacanos entre artesanos, diseñadores, escultores, decoradores, floristas, pintores, carpinteros y muchos más, provenientes de los municipios de Tzintzuntzan, Morelia, Quiroga y Pátzcuaro

Los artesanos montaron el altar en siete días, mismos en el que Doña Cuquita, esposa de Vicente, y sus hijos Vicente, Gerardo y Alejandro, así como sus nietos, estuvieron presentes y aportando con ideas.

Deja un comentario