Punto de Encuentro

Por Marisela López Díaz

“Saber gobernar es rectificar” Confucio

Esta semana los denominados gobiernos de la naciente Alianza Federalista, que conforman los gobernadores: Martín Orosco de Aguascalientes (PAN); Javier Corral de Chihuahua (PAN); Francisco Cabeza de Vaca de Tamaulipas (PAN); José Rosas Aispuro Torres de Durango (PAN); Enrique Alfaro de Jalisco, abanderado de Movimiento Ciudadano (MC); Silvano Aureoles Conejo de Michoacán por el Partido de la Revolución Democrática (PRD); Ignacio Peralta de Colima por el Partido Revolucionario Institucional (PRI); Miguel Riquelme Solís de Coahuila (PRI); el independiente Jaime Rodríguez Calderón de Nuevo León; y Diego Sinhue Rodríguez Vallejo de Guanajuato (PAN) decidieron abandonar la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO).
 
Ha habido de todo, opiniones en contra y a favor, argumentan que los 10 mandatarios tomaron la determinación por capricho, otros por un interés económico; lo cierto es que, este espacio dejó de ser el foro para fortalecer el federalismo tras la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de México, la agravante que orilló al rompimiento, fue la crisis por la pandemia del Covid19.
 
Son al menos 7 los fundamentos por los cuales en el 2002 se comenzó a integrar la CONAGO, entre los que destaca, proponer el diseño de programas incluyentes para satisfacer las demandas de seguridad, justicia, bienestar social, democracia y transparencia; fundamento que por lo menos en lo que llevamos de la pandemia no se ha cumplido luego de que la federación no veló por la atención a los estados para controlar los contagios por el COVID-19; tal es así que fueron los estados quienes de manera independiente se organizaron para hacerle frente a la crisis sanitaria.
 
Es cierto que la Conago no es un órgano vinculante, como su nombre lo dice es una Confederación, que sirvió en su momento de contrapeso político, para lograr consensos en torno a las decisiones federales; hoy la Conago ha quedado totalmente rebasada ante la crisis de salud y económica, y es quizás esta última donde recae la principal razón del rompimiento de los 10 gobernadores, por abandonar dicha confederación.
 
El reparto de los impuestos que se recauda en las arcas estatales  y que son enviados a la federación para la distribución a los estados debe cambiar, en función de la nuevas necesidades, hay una emergencia nacional, los estados necesitan más recursos para poder enfrentar la crisis, hoy las familias necesitan mas apoyos, las empresas mayores incentivos; ahí debe enfocarse el recurso y el apoyo.
 
Hoy la razón les asiste a los gobernadores que decidieron abandonar la Conago, no hay condiciones para permanecer ahí, pero tampoco hay muchas opciones por parte del gobierno federal , que ha decidido apostar el recurso de los mexicanos a sus grandes obras, el tren Maya y los aeropuertos.
 
Es por ello que uno de los motivos por los que se conformó la “Alianza Federalista” es para sumar esfuerzos entre las entidades de oposición política en busca de ser escuchados.
 
Lo que no ha entendido, el primer mandatario, es que un buen gobernante debe aprender a escuchar, atender y acordar con la oposición política, por el bien de terceros que son a quienes también gobierna.
 
La acción de los gobernadores fue necesaria y oportuna, ante una política interna inexistente, dado que la Secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero ha brillado por su ausencia y no ha hecho nada por dialogar con los gobernadores de oposición y buscar que ese rompimiento no le afecte al Presidente, aunque en realidad esperemos que esto no traiga consigo represalias políticas que impacten en lo económico y social para los 10 estados de oposición.
 
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El proceso electoral federal y local inició también esta semana y el escenario social, económico, de seguridad y ahora le sumamos el de salud, no es favorable en el país, sin embargo, siempre existe el ánimo de que será un proceso que se organizará y realizará con el objetivo de que los ciudadanos tengamos la libertad de ejercer el voto de manera libre y consciente, pero que además asumamos esa responsabilidad ciudadana de participar en los procesos electorales ya sea en su organización o bien acudiendo a las urnas el día de la jornada de votación.
 
En el caso de Michoacán aún queda pendiente la integración del Consejo General del Instituto Electoral del Estado (IEEM), luego de que se encuentra una consejería vacante y otra más lo estará a finales de este mes, por lo que esperemos que Instituto Nacional Electoral (INE)  seleccione a los mejores perfiles para el siguiente proceso electoral en la entidad.

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